La dietoterapia es, como bien indica la palabra, un tipo de terapia. Busca la prevención y curación de patologías o bien la eliminación de síntomas con la ayuda de una dieta adecuada.

A la hora de proponer una dieta, la dietoterapia no solo tiene en cuenta los alimentos que se ingieren sino los que se eliminan. Más cosas que se tienen en cuenta es los procesos a los que se someten los alimentos, que hoy en día son todo menos naturales.

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La importancia de los neurotransmisores en la dietoterapia

Lo que puede sorprender es que la dietoterapia no solo se utiliza para las enfermedades físicas, sino también para las psiquiátricas.

Cada vez se da más importancia a la relación entre la alimentación y el estado emocional y todo se basa en los neurotransmisores.

Los neurotransmisores son los mensajeros que transmiten información entre el sistema nervioso y otras zonas del cuerpo. Son los responsables de mucho de lo que sucede en nuestro cuerpo y entre todo ello están los estados emocionales.

Los neurotransmisores más importantes son:

• Serotonina.
• Dopamina.
• Acetilcolina.
• GABA.
• Adrenalina.
• Noradrenalina.

En estados como la depresión, el equilibrio de los neurotransmisores está alterado y podríamos decir que los mensajes que llegan al cerebro son confusos.

Pero vamos a ver para qué sirven exactamente cada uno de los neurotransmisores.

• Serotonina: este neurotransmisor se sintetiza a partir del aminácido triptófano en presencia de oxígeno. El ejercicio físico estimula su producción. Cuando los niveles de serotonina son bajos te sientes más irritable y negativo.
• Acetilcolina: activa la memoria y resolución de problemas. Cuando hay defecto de este neurotransmisor la memoria reciente se ve afectada.
• GABA: se sintetiza a partir de aminoácido L-glutamina con zinc y vitamina B6. Es el responsable de la relajación. Cuando los niveles son bajos aumenta la impulsividad, ansiedad e hiperactividad.
• Dopamina: se fabrica a partir del aminoácido tirosina. Es buena para la atención, memoria y buen comportamiento.
• Noradrenalina: fabricado a partir del aminoácido tirosina junto con zinc y vitamina B. Es el neurotransmisor de la motivación. Si está bajo te sientes más triste y aburrido.
• Adrenalina: este neurotransmisor es liberado en situaciones de estrés. Su presencia está relacionada con los mecanismos de supervivencia.

Este pequeño repaso de los neurotransmisores nos sirve para ver de qué estén hechos. Obviamente, si quieres mantener un nivel adecuado de los mismos, hay que llevar una alimentación que contenga los elementos a partir de los cuales se sintetizan.

• Alimentos ricos en triptófano: pescado azul, carnes magras (pollo, pavo y conejo), yema de huevo, lácteos, legumbres (sobre todo soja, alubias y lentejas), pistachos, almendras, chocolate negro, piña y plátano.
• Alimentos ricos en zinc: pescado azul, piñones, pipas de girasol y calabaza.
• Alimentos ricos en magnesio: lácteos, salvado de trigo, frutos secos, chocolate negro, verdura y fruta.
• Alimentos ricos en vitaminas del grupo B: carnes magras, yema de huevo, cereales integrales, verdura y fruta.
• Alimentos ricos en calcio: lácteos y fruta.

Otros componentes que favorecen la formación de neurotransmisores son la vitamina C. Uno de los alimentos mencionados, que quizá sorprenda un poco es el chocolate negro. Tiene propiedades que favorecen nuestra salud pero ha de consumirse con moderación.

Dieta recomendada para la depresión

Esta dieta no debe ser alta en proteínas, ya que las proteínas aportan muchos aminoácidos que compiten con el triptófano para absorberse.

Otro componente importante en la depresión es la flora intestinal, que tiene que ver aunque no lo parezca.

Una gran parte de la serotonina se produce en el sistema nervioso entérico. El sistema nervioso entérico es la parte del sistema nervioso que se encarga de controlar el aparato digestivo. Por eso es conveniente que durante los estados depresivos se cuide la flora intestinal. Para ello es conveniente el consumo de probióticos.

Dieta para hiperactividad

Estas personas deben tener 5 comidas fijas al día, generalmente 3 principales y 2 más ligeras.

• No deben dejar pasar más de 4 o 5 horas.
• No deben dejar pasar más de 1 hora desde que se levantan hasta desayunar.

Una persona hiperactiva debe eliminar de su dieta todas las comidas que lleven azúcares ocultos, así que ya sabemos que las chucherías y la bollería no son buenas compañeras. También conviene eliminar los yogures con colorante, sobre todo los colorantes rosa y naranja porque llevan excitantes.

En definitiva, las personas hiperactivas deben incluir en su dieta alimentos que favorezcan el equilibrio de los neurotransmisores.

Consejos para reducir el reflujo gastroesofágico

Si padeces reflujo tras las comidas debes evitar o reducir los siguientes:

• Sustancias que irritan como picantes, cítricos y tomate.
• Alimentos muy fríos o muy calientes.
• Consumo de alimentos ricos en fécula junto con frutas u hortalizas ácidas, vinagre, yogur o azúcar.
• Comidas copiosas.
• Bebidas con gas.
• Alimentos ricos en almidón.
• Moderar las comidas con muchas grasas.
• Comidas irritantes como café, alcohol, ajo o cebolla.
• Alimentos que ayudan a mejorar el reflujo.

Si sueles condimentar algunos platos con hierbas, las mejores para la digestión son estragón, eneldo, laurel, tomillo, romero y mejorana. Algunos alimentos que aliviarán tu reflujo son:

• Las ensaladas con hortaliza de hoja amarga.
• Las infusiones de boldo entre comidas.
• El kiwi y la piña porque aportan enzimas que mejoran la digestión.
• Si llevas intención de comer legumbres, ponlas en remojo durante la noche y échalas a cocer en agua fría.

La dietoterapia está cada vez más presente en la mejora de tu salud

La alimentación tiene que ver con los estados anímicos. Suele ser bastante frecuente que cuando una persona se encuentre baja de ánimo no le apetezca hacer nada. Como consecuencia, tampoco le apetece prepararse la comida y recurre a alimentos procesados que suelen llevar muchos azúcares, sal, grasas y aditivos. Como hemos visto, estos componentes no aportan nada ni favorecen el estado de ánimo.

La medicina cada vez se convence más de la importancia que tiene la alimentación para prevenir y tratar patologías. De hecho existen enfermedades que se están empezando a tratar modificando los hábitos alimenticios porque se ha comprobado que pocos pacientes sienten alivio con los medicamentos que se les recetan.

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